Esta semana, el CEO de Robinhood, Vlad Tenev, sorprendió en el TokenWorld 2049 en Singapur con una afirmación contundente:
👉 “En 5 a 10 años, todos los productos financieros estarán on-chain”.
La tokenización — convertir activos tradicionales (acciones, bonos, incluso bienes raíces) en representaciones digitales sobre blockchain — se presenta como la próxima gran revolución del sistema financiero. Pero, desde una perspectiva jurídica, el entusiasmo debe acompañarse de prudencia.
⚖️ DESAFÍOS LEGALES CLAVE
1º En cuanto a la naturaleza jurídica del token:
¿Un token de acción equivale exactamente a la acción? Para que haya seguridad jurídica, el inversor debe mantener derechos plenos (dividendos, voto, protección accionarial). El marco normativo aún no lo asegura en muchos países.
2º Interoperabilidad regulatoria:
Mientras la SEC en EE.UU. estudia propuestas de trading de valores tokenizados (como Nasdaq), en Asia vemos tensiones — China ha pedido pausar proyectos de tokenización en Hong Kong por riesgos financieros. Diferencias regulatorias que crean un mosaico complejo para los operadores.
3º Custodia y protección al inversor:
Si un token representa patrimonio, ¿quién lo custodia? ¿Qué pasa ante un hackeo o insolvencia del intermediario? Los marcos tradicionales de protección al inversor deben adaptarse al nuevo paradigma tecnológico.
4º Confianza y transparencia:
La tokenización no solo es un asunto técnico, también jurídico: requiere normas claras sobre información, trazabilidad y gobernanza de los contratos inteligentes que gestionan estos activos.
🚀 UNA OPORTUNIDAD, PERO CON LÍMITES
La promesa de Tenev refleja una tendencia global: democratización y eficiencia en el acceso a mercados financieros. Sin embargo, sin un marco legal sólido, esta transformación podría generar más riesgos que beneficios.
La gran pregunta no es si la tokenización llegará, sino bajo qué reglas de juego lo hará.
Los próximos años serán decisivos para construir esa arquitectura jurídica que permita que la innovación avance sin sacrificar seguridad ni derechos.
👉 ¿Crees que estamos preparados jurídicamente para una “financiarización tokenizada”?