En los últimos tiempos, los NFTs (Tokens No Fungibles) han sido objeto de intensos debates y críticas debido a su naturaleza altamente especulativa, la falta de subyacentes en algunos casos, y la percepción de inseguridad jurídica en relación con los derechos que supuestamente representan. A pesar de estas preocupaciones, su potencial para revolucionar el ámbito comercial no puede ser ignorado, especialmente a la luz de la reciente Electronic Trade Documents Act 2023 en el Reino Unido.
Desafíos Actuales:
Los NFTs, al representar derechos sobre activos únicos y no fungibles, han quedado fuera del alcance regulatorio de MiCA, lo que ha generado críticas y cuestionamientos sobre su falta de supervisión. Además, la Circular 1/2022 de la CNMV sobre publicidad de criptoactivos tampoco aborda completamente la complejidad de estos activos digitales.
El Cambio en el Reino Unido:
En contraste, el Reino Unido ha dado un paso adelante con la Electronic Trade Documents Act 2023, que permite la tokenización de diversos títulos valores, incluyendo conocimientos de embarque, letras de cambio y pagarés (promissory notes). Bajo ciertas condiciones, estos documentos tokenizados poseen los mismos efectos jurídicos que sus contrapartes físicas.
Desafíos a Superar:
Surgen preguntas cruciales en este contexto. ¿Cuál debería ser el estándar para la emisión individual de un título valor? ¿Debería un pagaré, un efecto comercial, ser emitido como un NFT? ¿Qué implicaciones legales tiene la tokenización de un promissory note en jurisdicciones que aún no han abordado este tema, a diferencia del Reino Unido?
Regulación en el Horizonte:
La posibilidad de crear redes dedicadas a la negociación libre de estos activos financieros digitalizados plantea interrogantes sobre la aplicación de MiCA y otras regulaciones. ¿Qué normativas se aplicarían en este escenario? ¿Cómo se gestionaría la supervisión y cumplimiento?
Potencial en Financiación de PYMES:
La tokenización de promissory notes abre la puerta a la creación de instrumentos alternativos, potencialmente parabancarios, para la financiación de pequeñas y medianas empresas (PYMES). La transparencia, trazabilidad y garantías de cobro facilitadas por los smart contracts podrían transformar el acceso a financiamiento para este segmento empresarial.